La Ley es un libro escrito por Frédéric Bastiat en el cual investiga que sucede en una sociedad cuando la ley se convierte en un arma usada por aquellos en poder para controlar y esclavizar a la sociedad.
Hoy la ley es justo eso, un arma que usa el gobierno para robarle a los ciudadanos sus derechos y propiedades para el beneficio de ellos y sus amigos en las grandes corporaciones.
Este sistema de robo legal (al que muchos le llaman democracia) está borrando de nuestra mente la diferencia entre justicia e injusticia. Los malandros averiguan como meterse al mundo de la política para poder robarle legalmente a los ciudadanos. Ciudadanos que son forzados a seguir dichas leyes bajo la presión de fuerza brutal.
¿Cuál es el propósito de una ley?
Según Bastiat, las leyes deben ser creadas para proteger los derechos del individuo
la vida,
la libertad
y la propiedad privada.
La ley no deber ser usada para obligar o forzar a una persona a que actúe de cierta manera.
Si la ley tuviera sentido y fuera justa, solo prohibiría cualquier acto que perjudique al prójimo. Una ley que prohíbe es diferente a una ley que obliga.
“Cuando la ley y la fuerza mantienen a una persona dentro de los límites de la justicia, no imponen más que una mera negación. Solo le obligan a abstenerse de dañar a los demás. No violan ni su personalidad, ni su libertad, ni su propiedad. Protegen todas estas. . . Pero cuando la ley, por medio de su agente necesario, la fuerza, impone a los hombres una regulación del trabajo, un método o una materia de educación, una fe o credo religioso — entonces la ley deja de ser negativa; actúa positivamente sobre las personas.”
(La Ley, Frédéric Bastiat)
Uno como individuo no puede forzar a otro individuo a hacer lo que uno quiere, no puede obligar a otra persona a actuar de cierta manera. Pero algunos grupos de individuos (gobiernos, organizaciones, corporaciones) sí pueden forzar a un individuo a actuar en contra de su voluntad.
“Dado que ningún individuo actuando por separado puede usar legítimamente la fuerza para destruir los derechos de los demás, ¿no se sigue lógicamente que el mismo principio también se aplica a la fuerza común, que no es más que la combinación organizada de las fuerzas individuales?”
(La Ley, Frédéric Bastiat)
“Si esto es cierto, entonces nada puede ser más evidente que lo siguiente: La ley es la organización del derecho natural de la legítima defensa. Es la sustitución de una fuerza común por fuerzas individuales. Y esta fuerza común solo debe hacer aquello que las fuerzas individuales tienen un derecho natural y legítimo a hacer: proteger a las personas, las libertades y las propiedades; mantener el derecho de cada uno, y hacer que la justicia reine sobre todos.”
(La Ley, Frédéric Bastiat)
Saqueo legal: La ley como un arma
Una de las principales maneras de utilizar la ley como un arma de fuerza es a través del saqueo legal. El gobierno entra a tu cuenta de banco, te saca el dinero y lo redistribuye a otras personas. Cuando el robo lo hace el mismo gobierno, no le teme a los tribunales, ni a la policía, de hecho, les habla para pedir apoyo.
“Cuando una parte de la riqueza es transferida de la persona que la posee, sin su consentimiento y sin compensación, ya sea por la fuerza o por el fraude, a alguien que no la posee, entonces afirmo que se viola la propiedad; que se comete un acto de saqueo. Este acto es precisamente lo que la ley se supone que debe suprimir, siempre y en todas partes. Cuando la misma ley comete este acto que se supone debe suprimir, se comete saqueo. The Law, Frédéric Bastiat
Aquellos ciudadanos que algún día de su vida fueron víctimas de ese saqueo legal prefieren estar del otro lado e intentar tener ese mismo poder en vez de buscar ponerle fin. Por eso algunos criminales se meten a la política, ser político no es tan mal visto como ser un criminal.
"Los hombres naturalmente se rebelan contra la injusticia de la cual son víctimas. Así que, cuando el saqueo está organizado por la ley en beneficio de aquellos que hacen la ley, todas las clases de rateros intentan de alguna manera ingresar, ya sea por medios pacíficos o revolucionarios, en la elaboración de leyes." La ley, Frédéric Bastiat
Bastiat creía que muchos en el poder usan la ley para cometer “saqueo legalizado” por pura codicia. Es más fácil tomar la riqueza de otros que trabajar para obtenerla.
“Ahora bien, dado que el hombre está naturalmente inclinado a evitar el dolor —y dado que el trabajo es en sí mismo dolor—, se sigue que los hombres recurrirán al saqueo siempre que este sea más fácil que el trabajo. La historia lo muestra con toda claridad.” (Bastiat)
Algunos usan la ley para practicar “saqueo legalizado” no por motivos egoístas, sino porque creen que al quitar riqueza y propiedad a unos podrán ayudar a los necesitados.
“Cuando un político contempla la sociedad desde la reclusión de su despacho, queda impresionado por el espectáculo de desigualdad que observa. Se duele de las privaciones que son la suerte de tantos de nuestros hermanos, privaciones que parecen aún más tristes cuando se contrastan con el lujo y la riqueza. Quizás el político debería preguntarse si este estado de cosas no ha sido causado por antiguas conquistas y saqueos, y por saqueos legales más recientes… Pero el político nunca piensa en ello. Su mente se vuelca hacia organizaciones, combinaciones y arreglos —legales o aparentemente legales. Intenta remediar el mal aumentando y perpetuando precisamente aquello que causó el mal en primer lugar: el saqueo legal.” (La Ley, Frédéric Bastiat)
Bastiat creía que la filantropía podía lograrse en una sociedad sin el uso del saqueo legalizado. En otras palabras, el hecho de que él se opusiera al saqueo legal para ayudar a los necesitados no significaba que estuviera en contra de ayudar a los necesitados.
“El socialismo, al igual que las ideas antiguas de las que surge, confunde la distinción entre gobierno y sociedad. Como resultado, cada vez que objetamos que el gobierno haga algo, los socialistas concluyen que objetamos que se haga en absoluto.” (La Ley, Frédéric Bastiat)
“No aprobamos la educación estatal. Entonces los socialistas dicen que estamos en contra de toda educación. Objetamos un estado de religión. Entonces los socialistas dicen que no queremos ninguna religión en absoluto. Nos oponemos a una igualdad impuesta por el Estado. Entonces dicen que estamos en contra de la igualdad. Y así, una y otra vez. Es como si los socialistas nos acusaran de no querer que las personas coman porque no queremos que el Estado siembre el grano.” (La Ley, Frédéric Bastiat)
¿Crees que una sociedad sea capaz de voluntariamente ayudar a los necesitados sin tener que sacar el dinero de impuestos?
La creencia de que solo el gobierno puede proveer ciertos servicios viene de un punto de vista perverso sobre la humanidad— asume que a los individuos les falta compasión y la capacidad de ayudar a los que más lo necesitan.
Si los impulos y las tendencias naturales del humano son tan malas como para no permitir su libertad [entonces] ¿Como es que las tendencias de estas organizaciones (gobierno) son siempre buenas?" La Ley, Frédéric Bastiat